sábado, 8 de agosto de 2009

LAS MUJERES SÍ SON OBJETOS...

Antes de aventurarse a sacar conclusiones apresuradas, es mejor aclarar lo antes posible el significado del título...
A todos aquellos que hayan venido aquí buscando una periódica cuota de machismo, mucho me temo que hoy voy a tener que enviarlos a casa con las manos vacías.
Sosteniendo que "las mujeres son objetos" ¿quiero decir con esto que puede uno hacer lo que le venga en gana con ellas? ¿que son elementos prescindibles y desechables que podemos utilizar a nuestro antojo? A estas y a otras tantas preguntas similares, mi respuesta es en efecto, un contundente "NO". Las mujeres son un objeto, sí. Pero al igual que en cualquier ciencia que se denomine epistémica y se jacte de serlo, hay que recalcar y sintetizar lo más posible el alcance y la naturaleza del objeto en sí. Por tanto, me gustaría puntualizar lo siguiente: Las mujeres son un objeto, pero objeto de deseo.
A cualquiera de ellas que lea esto último y se sienta ofendida, realmente la exhorto a que ahonde en su memoria y trate de asir aquel recuerdo vinculado a alguna vez que haya estado más de 20 minutos tratando de combinar la ropa, o dejar la "mercadería" lo más visible posible en aras de atraer a un espécimen masculino.
Pero sin entrar de momento en la casuística, me interesa por ahora poder simbolizar mi exposición en un matema que defina simbólica y simplemente lo aquí establecido. Contamos de momento con tres elementos en la ecuación; hemos establecido hasta aquí, sólo uno de ellos: a la mujer como objeto de deseo. Pues bien, todo objeto de deseo necesita imperativamente de un sujeto deseante y por supuesto, de un tercer elemento al que llamaremos, a falta de un término sinónimo, deseo en sí.
Este último elemento puede ser considerado por muchos filósofos y psicólogos como aquel que despierta la mayor cantidad de dudas, intereses y cuestiones.
Como yo no soy uno de ellos, y como todo aquel que ha llegado a este blog quiere oír (leer) acerca del comportamiento femenino, vamos a remitirnos de lleno al papel que cumplen las féminas a este respecto. Parece ser que un nuevo aspecto de su psyche ha sido revelado.
En el manejo que hacen de la realidad, un gran porcentaje de mujeres parecieran operar sin tapujes en una fantasía que ansían compartir, en donde ellas son buscadas, deseadas, propuestas por su parte como NO deseantes (ellas no buscan a nadie; ellas únicamente son buscadas) y lo llamativo del caso, es que no sólo están convencidas de ello, sino que buscan por todos los medios, desdoblar la realidad para hacerla encajar, ante los ojos de los demás, como la única verdad posible. A tal punto han de llegar estas hembras, que cuando sienten atracción por un macho, quieren hacerle creer que es él el interesado y no a la inversa.
No se trata aquí de un plan macabro, sino que ellas mismas parecieran no tolerar o encontrar insoportable el hecho de desear a alguien que tal vez (y sólo tal vez) no las desee recíprocamente.
Ante el caso de que una mujer de esta índole invite a un hombre a una especie de "cita", ella diría algo como por ejemplo: "estaría bueno salir a tomar algo algún día, ¿no?" El hombre, en su continua e ininterrumpida búsqueda por sexo, argüiría: "sí, estaría bueno". Y días después, ella le diría al sujeto en cuestión: "¿cuándo vamos a salir a tomar ese trago QUE ME INVITASTE?". El hombre generalmente, abrumado ante la eventual posibilidad de intercambio de fluídos, ni en su más remoto nivel de introspección se pondrá a evaluar el acto que aquí está llevándose a cabo.
Está (o estuvo) en una posición única de sostener aunque sea por 5 minutos, la sartén por el mango. La mujer lo quiere, lo necesita, lo desea... por única vez en su historia, él tiene algo que ella quiere, pero ella es más rápida. Revierte la situación y la vuelca a su favor. Así como cuando el conejo simpático de la WB discute con el malhumorado pato de la misma productora, a modo de...
-Conejo: Que sí
-Pato: Que no
-Conejo: ¡Que sí!
-Pato: ¡Que no!
-Conejo: ¡¡Cuando digo que no, es no!!
-Pato: Pues he dicho que sí y cuando yo digo que sí, es sí y voy a hacerlo, voy a saltar del precipicio, porque he dicho que SI.
Pero rara vez, esto al hombre le importa. De hecho, casi nunca. Mientras el hombre consiga lo que desee, está todo bien y ella puede vivir la "mentira" que desee (mentira entre bastardillas, puesto que para la mujer se trata de una realidad inexpugnable). Nadie recibe daño alguno.
Otro es el cantar cuando la mujer esparce, a espaldas del hombre/víctima, una "realidad" que no es tal, salvo en su propio mundo subjetivo. El hombre pasa entonces, desde el punto de vista de la mujer (y sus oyentes) a encarnar el papel de perseguidor, acosador, calentón y demás dengues. La mujer suscita o mantiene una historia con un hombre. Hay (o no) encuentros sexuales, eróticos y sensuales. Intercambio de mensajes de texto, algún susurro erótico, de parte de ella y una respuesta por parte de aquel, etc. Si ella manda un sms, él se lo contesta. Si ella comienza una charla subida de tono por chat, obviamente, él responde y así sucesivamente... ¿pero cuál es el problema con esto? Que ella corre a relatar los hechos, según su conveniencia. Ella cuenta que es él el que escribe sms, el que la busca por chat, el que le hace comentarios, en definitiva, la pasiva víctima de todos sus acosos. De pronto, él se convierte en uno de esos hombres que no entienden un "no" (un "no" que por demás, jamás existió). Ella lo incita, y él sólo se atiene a responder según sus instintos... pero ella cuenta lo contrario. Es él el activo, el que no cesa, el que no se detiene ante nada, puesto que implícitamente lo que ha de entenderse, es que ella es taaaaaaaan deseable, que tal locura parece razonable. Ella porta tal belleza y galanura, que cualquier hombre al vislumbrarla pierde todo tipo de razón cívico y comportamiento social aceptable. El ya no es un humano, es un alienado a la hermosura ajena, hermosura que por demás le está "eternamente negada" (según palabras de la mujer), sin importar si la noche anterior esta pareja de víctima y victimario se estuvieron fusionando en uno, a través del más fogoso acto sexual. Por supuesto, ella a eso no lo cuenta, no. ¿Cómo sería pensable en el mundo de tal mujer perfecta, reconocer abiertamente que ha mantenido relaciones sexuales?
Ella vive la fantasía de ser pura e inmaculada... a su vez, se sostiene como la mejor amante. Cree ser un terremoto en la cama, pero jamás tocada, siempre deseada, pero inaccesible, etc, etc, etc...
Y aquí es donde los hombres empezamos a elevar la protesta al cielo. Es aquí donde yo insto a mis compañeros de género a que presten más atención. No permitamos que lo que "Mónica" (pseudónimo) le hizo a "J.J. Metro" (otro pseudónimo), se repita. "Mónica" encamose con J.J. Metro. Mónica engañaba a su novio con J.J. Mónica se interesó por él, lo buscó, lo llevó a la cama, le prometió más noches de pasión y hasta la fecha le manda por mail, ciertas fotos suyas de su escultural cuerpo desnudo. J.J. espera, impaciente, un encuentro para su descarga seminal. Mónica relata los hechos en el ambiente de trabajo: "No sé qué le pasa a J.J... está obsesionado conmigo, no sé por qué... si yo no le hablo..." y así sucesivamente. Por supuesto, J.J. recibió órdenes explícitas de Mónica de no decir palabra acerca de los encuentros sexuales... ¿qué pensarían de ella si supieran que no es la dócil y perfecta novia que dice ser...? J.J. tratando de no ofenderla, mantiene el secreto. Ella no. O más bien, lo mantiene a medias. Ella se reserva los relatos de sus acciones. Las re-acciones de J.J, son contadas con lujo de detalles. Algunos de ellos, hasta exagerados en demasía. Pero todo trabajo de oficina es peor que pueblo chico. Todos oyen todo y nadie se guarda nada. J.J se entera de los comentarios y estalla en furia. Comenta su versión de la historia y hasta tiene las pruebas para demostrar su veracidad.
Hace larga data que Mónica no es parte del "crew" de la ofi, pero las repercusiones de su fantasía mental todavía vibran en los ojos muertos de J.J. que desde hace algún tiempo, odia, al igual que yo, todas esas pequeñeces que hacen de ciertas mujeres, lo más despreciable sobre la tierra.
La verdad es una y originaria, a disposición de quien la busque y desee de verdad hallarla; apelando un poco a ciertos ardides, traerla a la luz no debería de resultar problemático, pero cuando se trata de extraer una verdad femenina, uno debe estar dispuesto a enfrentar las doce tareas que algunos sostienen fueron impuestas a Hércules y otros a Heracles, pero que sin ninguna duda son obra y gracia de Hera... la más celosa, desagradecida, vengativa y quejosa mujer que nos haya brindado cualquier mito, historia o religión.
Quedándome por ahora en esto de la "cultura" griega, quiero adelantar que en mi próxima entrega, revelaré cómo la mayéutica puede ser utilizada a la hora de lidiar con las mujeres que nos instan a adoptar una postura defensiva ante sus armas de seducción. Para ir cerrando la idea, quería comentar lo siguiente.
En cuanto a deseo se refiere, la mujer puede o no, representar cierta postura, ya sea como deseante, ya sea como deseada. Argumentos en pro y en contra se han mantenido verosímiles en tanto la mujer es o no, cierta clase de objeto. Lo que nadie puede rebatirme, es que son unos aparatos bárbaros.

jueves, 9 de abril de 2009

LA CAJA HISTÉRICA

Un alumno desesperado en busca de un mentor que me cobije bajo su ala. Eso soy.
Soy el típico estudiante que pone ojos embobados de quinceañera enamorada y mira con atención a aquel profe que demuestra saber un poco más que el resto. Si hago una pregunta en clase y recibo una respuesta distinta de "te lo averiguo para la clase que viene", tiendo a pensar que hallé por fin al maestro que nunca tuve. Pero a veces me pregunto si cuando aparezca aquella figura encarnada en el señor Miyagi, sabré apreciarla como es debido y no le seré desleal como hoy procederé a serlo con mi primera institutriz.
Aunque libriano para el zodíaco occidental, mi nacimiento en realidad fue atestiguado por un centenar de constelaciones formadas por satélites artificiales. En efecto, nací en una era globalizada; como tantos otros hijos de la generación X, recibí la mayor parte de mi educación a través de una pantalla. Me gradué con creces de "zappingero" y ahora estoy haciendo un postgrado en DVD.
Con los mismos ojos con los que hoy miro al Dr. Isaac o al Dr. Chiappero, supe mirar años atrás al mundo de Beakman, el Chavo del 8 y a McGyver.
Siempre guardé grato recuerdo de los capítulos de los Simpsons y cuando me sucede algo extraño, todavía tarareo la cancioncita de la dimensión desconocida...
...pero hoy por hoy, he de admitir que me siento traicionado.
Habiendo emprendido una cruzada templaria contra la histeria femenina, tengo que soportar ahora los avatares de la histeria de la TV.
Solía cuestionarme el por qué la gente habla alrededor del dispenser de agua, contando los capítulos de las series de moda y yo no puedo compenetrarme con ninguna.
"?No viste <HEROES> ?" me preguntan. Contesto que "no" con mucha indiferencia. "¿Y <LOST> ?" -"Tampoco", les replico. Contestaciones como "nooooooo, vos estás looooco, no sabés lo que te perdés..." muy francamente, hoy me tienen sin cuidado. No, no sé lo que me pierdo y honestamente, Uds. tampoco. No saben ni lo que ven y todavía no se han enterado.
Al igual que una histérica que te deja observar sus bragas o luce muy abiertamente su escote y te sonríe pícaramente mientras te habla al oído y todo lo que te dice suena a posibilidad de una relación sexual que no se avecina nunca, pero que está ahí, tan tangible como la zanahoria para el burro, la tele de hoy en día seduce con falsas promesas de que en el capítulo que sigue, "algo" (lo que sea) va a pasar y en realidad, nunca pasa nada.
Les juro que hice el intento de sentarme a ver estas series, pero el hecho de estar capítulo tras capítulo al borde del asiento, en determinado punto me termina hartando.
Lo peor de todo, no es la programación, sino los especuladores que día a día tengo que aguantar diciendo cosas como "para mí, lo que va a pasar es... tal cosa" y escuchar el comentario de una segunda tarada, que muy entusiasmada le contesta "no! porque yo me metí en un foro y en internet ya hay capítulos de la temporada que sigue y el papá de fulano en realidad no aparece todavía, o sea que lo que puede llegar a pasar en realidad es esto otro..." y así sucesivamente. La gente fantasea con lo que ha de venir, que en realidad no viene (ni eso ni nada más, para ser sinceros) y mientras, en algún lugar obscuro del mundo, alguien todavía hace plata sin ofrecernos absolutamente nada.
Digamos... me senté a ver "héroes" una vuelta y... se trata de gente que tiene poderes, pero de esta gente se conoce poco y nada. Alguien los persigue, pero no sabemos quien. Tienen superpoderes, pero no sabemos por qué ni cómo. De hecho, nadie sabe quien será el próximo en adquirir poderes. No se sabe qué va a pasar, no se sabe qué pasó, muchas veces no se entiende qué está pasando. De hecho, cada que ves un capítulo, aparecen escenas del capítulo anterior, que ¡no sucedieron nunca!. O sea... te ponen escenas que supuestamente pasaron en los episodios previos, pero en los episodios previos, esas partes no existen. Sobre que son una copia de bajo presupuesto de los X-Men, gustan de demorar las cosas mucho más de lo necesario. Al menos los hombres X resolvieron todas sus cuestiones en 3 películas. Estos otros "mutantes" ya van por la 4ta temporada y todavía no está pasando nada.
Bueno, no seamos malos, de seguro que LOST, sí es un hittazo. Un montón de gente, perdida en una isla donde hay un monstruo hecho de humo (que aparece en dos capítulos), viajan al pasado, todos están relacionados con todos, en la isla hay más gente (a pesar de que al principio buscaron más gente y nunca había nadie), malos, buenos (¿quién es quién), van, vienen, uno es padre, no... esperen, no es padre, sí... era padre al final, no... me equivoqué, era el otro, ah... ese otro en realidad no es ese, sino que es su propio hermano, hay un malo, ¿y qué fué del monstruo de humo?, y un día se van de la isla, pero de la isla no pueden salir en realidad, el malo viajó al pasado con los buenos, los buenos se vuelven malos, a todo esto el padre no es padre... ¿? (el argumento de hecho creo que es así... no se me escapa nada, verdad?). No, esperen... me olvidé: el único personaje (agregado) que les plantea ciertas dudas (típicas de fans que preguntan en los foros) acerca del por qué de ciertas incongruencias en la serie, explota. Sí... así como lo leen. Un día hay un tipo agregado cual Puchi (el perro de Tomy y Dally -Itchy and Scratchy-) y les empieza a cuestionar cosas a los personajes como "¿por qué son siempre los mismos los que van a las misiones?" etc etc etc y mientras les pregunta eso, el tipo explota. EX-PLO-TA. Están descargando TNT mientras el personaje va haciendo preguntas que los escritores no quieren responder y el tipo... explota. (¿No les suena a "tengo que volver a mi planeta, adiós" -Puchy murió camino a casa-)
Y mientras toooooodos, esperan a que el tatuado de prission break se escape de la OOOOTRA cárcel en la que lo metieron, yo me tengo que comer propagandas tentadoras que me incitan a responder interrogantes que en realidad no me generan dudas en lo más mínimo., pero sin cuyas respuestas no puedo hablar con mis compañeros del trabajo. "¿Qué es SCILLA", "¿Quién es el fumador cuyo rostro no se ve?" "¿Qué significa el número tatuado en la espalda de Jimmy?" -¿Les soy sincero? No sé ni me importa. No me voy a comer 8 temporadas de ninguna serie, para que al final "SCILLA" termine siendo la marca de chocolates que come el protagonista, ni que el número en la espalda de Jimmy un buen día desaparezca y en realidad no era un número sino que era una mancha de nacimiento y no significaba nada porque el escritor se olvidó de que había puesto un número en un personaje.
Mientras reemplazan una pregunta con otra y episodio tras episodio me quieren tener atento a sucesos que, valga la redundancia, no suceden nunca, yo podría haber estado viendo TyC a pesar de que el fútbol no me gusta.
Imaginen que van a la escuela y el profe al final de la clase les dice: "chicos, la clase que viene, vamos a ver (o no) cuál es la respuesta a 2+2. Llega la clase siguiente y el profe dice... "saquen sus cuadernos de inglés" entonces los alumnos sacan los cuadernos de inglés y el profe les dicta: "si una piedra cae a la velocidad de la gravedad, a una distancia de 8Km sobre el nivel del mar y no se considera la fricción del aire... bueno, cierren los cuadernos, la clase que viene termino de dictarles el problema y vamos a ver en realidad la respuesta a 2+2 en inglés". Llega la clase siguiente y el profe les dice que analicen el sujeto y el predicado de... no, mejor es sacar el libro de Cs. sociales y estudiar a los indios Comechingones y la clase que viene vemos lo que les gustaba cultivar... ¿No dejarían de ir a un colegio así?
Al igual que las mujeres (histéricas) las series de hoy en día, son todas iguales.
Caja boba, caja boba... el bobo es uno por aguantar que lo histeriqueen en todos los canales.




lunes, 23 de marzo de 2009

OTRA QUE VIERNES 13

Jamas experimenté arrepentimiento ni me sentí atormentado por sus rostros cada noche. Algunas películas de guerra suelen mostrar la figura de algún soldado avergonzado relatando insoportables pesadillas en las que es acosado por fantasmas del pasado portando las caras de sus víctimas, o bien, a veces termina la escena con el gendarme saboreando el cañón de su propia pistola. Último recurso para acabar con el suplicio de la culpa. A mi eso no me pasa. No me sucedió nunca.
Contrariamente a cualquier psicópata, no lo hice nunca por diversión. Tampoco porque me haya sido encomendado. No me interesaba juguetear con mis víctimas ni hacerlas sufrir. Una especie de instinto natural me empujaba a acabar rápidamente con ellas. Nunca llevé la cuenta, jamás me jacté de nada. Se me convirtió en hábito. En necesidad. En un acto tan simple como rascarse la zona que pica, yo ponía fin a la vida de aquella cuya sola presencia me generaba repulsión. Comencé desde niño. Mi madre me enseñó. Si, de ella... mi madre... una mujer. De ella aprendí el delicado arte de exterminarlas. En ese punto, creo haberla superado. Ella era bastante improlija. Siempre quedaban partes desparramadas por algún lado. Yo en cambio, gusto de implementar métodos un poco más ordenados. No por la evidencia, sino por la pulcritud. Como ya lo expuse previamente, matarlas era un arte. No recuerdo lugares, ni formas, ni detalle alguno. De tanto en tanto tengo flashbacks que me llevan a aquel callejón oscuro en donde una intento escapar sin éxito, pero eso es todo. La considero una actividad diaria. Como cepillarse los dientes o preparar la comida. No lo anoto como tarea del día; es más bien una especie de reflejo. Muchas veces le prometo a Dios comenzar a respetar todo lo que vive, pero matar a una de ellas no me suena a estar violando parte del trato. Si bien no pienso en ello y ni siquiera lo considero algo del todo "malo", supe inmediatamente a qué había ido ella a mi departamento. Supe que había ido a vengarse.
El resplandor azul-celeste de mi monitor era todo lo que se interponía entre la completa obscuridad y yo. Entretenido en mi anémica conversación de chat, la escuché moverse en la cocina. Dejé de tipear para poder concentrar mejor mi audición. Tenía todavía la vista fija en el teclado, pero mis dedos ya no se movían. Sentí un temblor frío ascender por mi pecho y rodear mi cuello hasta la espalda. Su presencia me era familiar. Familiar y reciente. Imaginé que sería ella. La que dejé escapar la noche anterior. Cómo llegó a meterse en mi hogar, me resulta hasta la fecha todo un misterio; pero en ese momento no importaba. Sus motivos eran mucho más ominosos que sus medios. Ella estaba ahí por una razón. Ella estaba ahí por mi. Me tomó un tiempo el encontrar una reacción para la parálisis que me invadía. Durante segundos que se prolongaron por lo que parecieron ser eones, me mantuve inmóvil. Mantuve la respiración, con la ilusión de agudizar la escucha. En ausencia de luz, ella tenía la ventaja y ambos lo sabíamos. Aventé una zapatilla contra el interruptor; la habitación se iluminó por completo. Para la próxima, instalaré el mecanismo del "claps on", porque no siempre contaré con buena puntería. En cuanto las luces se encendieron, la vi correr a toda velocidad en diagonal por el living. Yo salté desde la silla hacia la cama y rodé sobre mis espaldas, cubriéndome detrás de dicho mueble. No tenía mis armas a mano, así que debía improvisar. Tomé un puñado de monedas y las aventé por la puerta generando una cortina sonora que me permitiera desplazarme sin ser detectado. De una patada rompí el vidrio de la estantería y los libros se desplomaron sobre el suelo.Tomé varios trozos de cristal y comencé a arrojárselos como "shurikens" pero la maldita era rápida. Demasiado. Me quedé sin pseudo-proyectiles y ella y yo nos miramos fijamente. Avanzó hacia mí a toda velocidad. Yo rodé hacia un costado y tomando un diccionario caído al suelo, se lo aventé, pero fallé nuevamente. Corrí descalzo por sobre los vidrios rotos y rastros de sangre se plasmaron en los mosaicos recientemente pulidos. El suelo me resultaba resbaloso. La cera y la sangre formaban una superficie netamente incómoda para correr. Al menos para mí. Ella se desplazaba sin dificultad alguna. Tomé una silla y comencé a agitarla en su cara. Ella simplemente no retrocedía. Avanzó lentamente. No denotaba temor alguno ni respeto hacia lo que yo representaba (nada). Mi ventaja siempre consistía en el factor sorpresa. Esta vez, no lo tenía. Haciendo un gran esfuerzo, apreté los dientes y corrí hacia el baño. No tenía plan alguno, no sé por qué me aprisioné solo. En un intento desesperado, me pregunté qué haría McGyver en mi situación. Tomé el desodorante de ambiente y el pote de crema enjuague. Abrí la puerta del baño y allí estaba ella, esperándome, sin emboscada alguna. Le aventé la crema enjuague, sin esperar acertar. No lo hice. Corrí hacia la cocina y busqué los fósforos. La leve llamita generada por el palito cenit, fue suficiente para anteponerla al chorro del desodorante y generar un efectivo lanzallamas. Así armado procedí a buscar a la muy maldita... pero no pude hallarla. La ventana se encontraba abierta, pero no creí que hubiera saltado. No la escuché ni mucho menos pude verla, pero sentí su presencia metros atrás. Volteé la mesa y busqué refugio tras ella. Noté entonces lo endeble de las patas de aquel mueble. Arrancar una no me resultó trabajoso. Salí al encuentro de la muy maldita y ella hizo lo mismo. Sabía que era mi última oportunidad y no quise desperdiciarla. Ella avanzó hacia mí, pero no corriendo, sino de un salto. Yo abaniqué mi precario garrote y le asesté un golpe mortal. Ella yacía boca arriba, intentando incorporarse...Otro golpe más, completó el trabajo. Ahora inmóvil, sólo representaba para mi, la ardua tarea de deshacerme del cuerpo. Inerte en el suelo, se veía prácticamente inofensiva. Sin embargo, algo en ella todavía me generaba temor y asco. Me retiré a otra habitación, intentando encontrar dispositivos para encargarme del cadáver. Volví con una pala y una bolsa de plástico... pero ella ya no estaba ahí. Muy parecido al final de una mala película de terror, me hice a la idea de que ella estaría parada detrás mío intentando acabarme con una estocada rápida o empalarme con un machete de tamaño industrial... pero no había nadie allí. De todas formas, eso ya era exagerar demasiado.
Tras buscarla por un buen rato, no pude dar con ella. De momento no había peligro, pero sé que volverá. Un charco viscoso de color blancuzco, era prueba suficiente de que la cucaracha estaba herida y supuse que había decidido retirarse. El maldito insecto no había muerto y esto... aún no termina.
No hasta que los de RAID inventen algo netamente efectivo, o bien yo pueda exclamar orgulloso que: "las cucarachas entran; pero no salen".

sábado, 28 de febrero de 2009

CERDOS Y DIAMANTES

A pesar de que el más viril de los viriles jamás se enfrentaría a mano limpia contra un tigre, un oso o a Godzilla, para un hecho tal como lo constituye la cacería de jabalíes, un baqueano gusta de usar únicamente un cuchillo, pero a su vez lleva consigo muchos perros distintos, obviamente para distintos fines.
El "spotter", perro ágil, de buen olfato, pero débil, es el que sin esperar la señal del amo sale primero cuando huele el rastro de la bestia y comienza a ladrar cuando la divisa.Tras el aviso de su fiel compañero, el cazador libera 5 o 6 perros de “ataque” (o pseudo-ataque) que a toda velocidad rodean al chancho colmilludo, en aras de prohibirle el escape y debilitarlo. La presa entiende la situación y por lo tanto se defiende.
Antes de que el jabalí pueda herir o matar a alguno de estos leales canes, el cazador adiestrado ordena a sus perros regresar, al mismo tiempo en que libera a su animal insignia. Generalmente un perro grande de mandíbula fuerte, con capacidad de morder durante un tiempo prolongado, sin tener que abrir el hocico para respirar. Este último sujeta al jabalí por el cuello mientras el baqueano se aproxima a toda velocidad con su cuchillo presto a enterrarlo en el corazón de la víctima. Una vez que siente el cuchillo clavársele en el cuore, el jabalí desiste. Hasta entonces, la pelea persiste.(Esto en caso de que el cazador sea macho y lo haga con cuchillo... si lo hace con rifle no hace falta ningún perro... pero esa es otra historia).
Comienzo a entender el hecho de que las histéricas son lo opuesto del jabalí. Lamentablemente, los hombres somos iguales a los perros.
Verán… el jabalí se debilita al ser perseguido y rodeado, suceso que tiene efectos opuestos para la histérica. Aquella histriónica sobre la cual se abalanzan los dingos de todas las especies, sufre un “agrandamiento” del ego de magnitudes exponenciales que dificulta su captura. Muy por el contrario, la indiferencia masculina tiene en ellas efectos similares a los que la kryptonita tiene sobre Superman.
Dentro de esta nueva terminología, en algo me parezco al "spotter". Soy el que divisa primero a la bestia y trato de dar aviso.
“Es una histérica” les dije a los chicos del trabajo, refiriéndome a la nueva esclava del sector 7G (no tenemos sectores… pero es a modo de chiste).
“Es una histérica inmadura y no sabe histeriquear”. Mi mensaje fue claro, pero ineficiente.
Para este punto, todos saben que cierto tire y afloje en lo que a relaciones con el otro sexo se refiere, algunas veces resultan entretenidas. Esta regla se cumple casi siempre, excepto que la mujer en cuestión no sepa ser mujer. Cuando la histérica histeriquea MAL, los hechos no sólo no son divertidos, sino que se tornan frustrantes. La histérica inexperta no despierta interés ni deseo, sino ganas de golpearla en la nariz con el codo.
Contra todos sus instintos, los perros de “ataque” se contuvieron cuanto pudieron y trataron de no entrar en su juego. No la ignoraron, pero avanzaron con cautela. Después de todo, tampoco me gustaría que se le niegue el saludo a alguien, simplemente porque otra persona le tiene mal concepto. Yo soy un tarado más de entre tantos, que emiten juicios acerca de gente que no conocen y que creen conocer por pocas palabras que se llegan a cruzar. Sin embargo, en estos casos me gustaría que se me dé más bola.
En mi hábitat de trabajo, tenemos 4 perros de ataque bastante eficientes. Generalmente son los que halagan tanto a las chicas, que las mismas se terminan creyendo las reinas del sub-mundo del call center y luego no hay poder de Dios que las baje de su propio pedestal. Si en vez de hablar de mujeres hablásemos de porcinos con afilados dientes y contásemos con la ayuda de estos “4 perros”, tal vez habría costeletas de cerdo para la cena, día de por medio.
Pero esta vez, “los de ataque” se portaron. Usaron el sentido común y comprobaron mi anterior diagnóstico. “Es una histérica de las malas… una histérica de cuarta” me confirmaron.

A lo mejor ustedes creen que estoy siendo duro. Que ser una mala histérica (para mi) implica no dar bola o ser difícil. No… para que entiendan de lo que hablo, esta es una chica que LITERALMENTE se acerca a uno “sensualmente” (de hecho lo hace de forma que da gracia, puesto que modifica su forma de caminar y termina pareciéndose a Johnny Bravo por como tambalea los hombros, pero ella intenta ser sexy), te pone la boca rozandote la nuca y profiere palabras tales como “¿te asustaste? ¿te pongo nervioso, no?”. Uno, realmente exaltado por lo que acaba de pasar, se aleja un poco (casi un metro) y le pregunta “¿qué te pasa? si... me asustaste, che ¿qué pasa?” a lo que ella contesta “¿cuándo me vas a invitar a tomar algo?”. Uno, todavía sorprendido por estos hechos sin sentido, no contesta nada y la mira fijamente, simplemente para esperar la carcajada o la explicación del chiste. El silencio se prolonga. Uno finalmente se anima a romper el ambiente tenso, preguntándole: “disculpame… vos sos la nueva, ¿no? ¿Cómo te llamás?
Ella comete el error de hablar nuevamente: “ay, olvidate nene, entre vos y yo no va a pasar nunca nada... además yo no me engancho con nadie, menos en el laburo”. Se ríe con una carcajada falsa (como quien acaba de expresar verbalmente su plan para conquistar el mundo) mientras un charquito de baba se le junta en la comisura de los labios, eliminando así, toda posibilidad de ser mínimamente llamativa. Genera malos afectos y hasta cierto asquito.
El break se le está terminando, así que te dice “chau” y se va.
Uno piensa “parece que está loca”, pero luego la escucha hablando con otro y sus palabras son estas: “yo no quiero que acá se diga que soy una put@, por eso no hablo con nadie acá adentro y no me quiero meter con ningún chabón”.
La teoría se confirma. Está loca.

Nota del autor: No les miento… estos hechos son reales (incluso incompletos porque si les cuento todo, no me creen).

Volviendo a la analogía de los cerdos y los canes… el spotter (yo) fui el primero en hablarle, puesto que fui el único en compartir su mismo horario nocturno por un tiempo, ya que yo estaba cubriendo el “shift” de otro compañero que afortunadamente (para él) se encontraba de vacaciones. Al retornar a mi horario habitual por las mañanas, di aviso a los cientos de otros perros que cohabitan conmigo. A los 4 principales por sobre todo, ya los había alertado durante la noche.
No reparé en que nuestro perro fuerte y grande, estaba también gozando de sus vacaciones y por tanto, ausente para recibir la señal de alarma.
“No ataques”, le habría dicho si hubiera tenido la oportunidad. Pero no la tuve.
Comenzaron mis vacaciones y terminaron las suyas, evitándose así toda posibilidad de contacto entre perros amigos.
Pobre perro grande. Nunca tuvo oportunidad.
Lo que sigue, es la historia de perro grande, de la cual NO fui testigo. No tengo como corroborar datos, puesto que sólo cuento con lo que me ha sido relatado. Sin embargo, conociendo a los participantes, no me caben dudas de que las cosas se dieron así.

Perro grande y otros tantos (incluida la histérica en cuestión) salieron una buena noche, a celebrar no se que evento, en no se que lugar.
Aislado y pensativo, perro grande se retiró a un lugar abierto y encendió su cigarrillo.
Contemplando la magnitud de la noche (y las colas de unas tantas), la histérica se le acercó y comenzó a bailarle al lado. El la observó bailar por un rato, pero no se movió de su lugar. Ella interrumpió la danza.
Mirándolo fijo y sonriendo pícaramente, se le acercó como quien se acerca a alguien en un boliche para poder hablar.
Casi apoyando sus labios histéricos sobre los oídos de big dog, le preguntó: “si querés darme un beso ¿por qué no me lo das?”
Nuestro gran danés inquirió: “¿cómo decís?”.
Ella repitió la pregunta literalmente.
Perro grande sintió sus instintos animales emerger y se abalanzó sobre la presa.
Si las cosas se hubieran dado de modo natural, muy probablemente se le habría prendido del cuello sin soltarla (bien a lo perro y chancho) pero no… la histérica le corrió la cara.
Perro grande hizo un segundo intento, pensando que ella sólo quería juguetear. La histérica iba en serio. Su cara se movió nuevamente esquivando el beso.
Big Dog, un tanto enojado, no le dio muchas explicaciones y la dejó sola por un tiempo.
Dando una vuelta por el boliche, la vio sentada sola en un sofá amplio. Se le acercó lentamente haciéndose el desentendido y se sentó a su lado.
“Esta es la parte en la que yo vuelvo” le dijo poniendo un grave tono en su voz de locutor.
Ciertos detalles los he olvidado, pero la cosa es que en algún punto, ambos comenzaron a acariciarse de modo tal que la situación se fue calentando.
Perro grande intentó el beso una vez más. Ella lo detuvo.
A lo mejor, si la cosa hubiera quedado ahí, todo hubiera terminado con ella quedando como una idiota y el, sintiéndose un poco confundido… pero no… ella tenía que volver a abrir su bocota.
-“Ya conozco a los tipos como vos, solo quieren una cosa”
-“¿A los tipos como yo? Me parece que estás confundida, bebé…”
-“Si, si yo los conozco a los que son como vos. Además yo tengo novio y lo amo”
-“¿Pero qué sabés vos de mi? No te conozco, es la primera vez que hablamos, creo que ni sabés como me llamo…”
-“Si, pero…”
Perro grande no la dejó terminar la frase.
Entrando en razón, se levantó de su lugar y dándole dos palmaditas en la espalda, le dijo: “tenés razón, nenita, tenés razón”.
La abandonó en su asiento y no supo más de ella hasta la jornada laboral siguiente.

A penas volví al trabajo, lo primero que vi fue a perro grande haciendo lo que sabe hacer mejor: aislarse y concretar su trabajo. Fui a saludarlo y a los pocos segundos, la histérica nos pasó por al lado. Me dedicó una sonrisa y un "¿cómo estás?" el cual no le contesté, debido a que desapareció antes de que pudiera hacerlo.
A él no lo saludó, cosa que no pareció afectarle en absoluto, salvo por cierta expresión que denoté en su rostro: indignación mezclada con un desvanecido matiz de desprecio hacia ella y dos pizcas de burla (y una cucharada de casancrem).
Mirándome, se mordió los labios y me dedicó con los ojos, un mensaje que me lo dijo todo: "esta mina es una tarada".
En un acto cómplice, le dije al gran perro: "es medio huequita la pobre, no?", tras lo cual me dijo "acompañame abajo, te quiero contar algo".
Allí fué donde me enteré de la historia que acabo de relatarles y por tanto, confirmé mi teoría. A la chabona esta, algo le falla.
Gran perro y yo, acordamos en que este insulso requecho de mujer, no tiene idea de lo que hace y muy elocuentemente, perro grande acotó también: "...quiere jugar un juego con las reglas de otro. Se la ve un poco perdida en lo que hace, a la pobre… medio que no tiene idea de lo que tiene que hacer para saber histeriquear. No le sale."

Sé que le estoy dando con un caño a alguien que no ha llevado a cabo actos del todo malignos, pero si hay algo que realmente jode, es el infantilismo eterno. Lo que molesta no es su estupidez, sino esa actitud pendej@. Hablamos de alguien que tiene casi 25 años y se comporta como una nena de 11 en sus peores momentos. La de 11 que pretende que tiene 16 y no sabe cómo hacer para encajar la realidad con su fantasía.
No se da cuenta de que mentalmente no está a la altura de la situación, cerebralmente es una beba en pañales; es a duras penas una pobre cachorrita y éste… bueno, éste es un juego para los perros grandes.

jueves, 29 de enero de 2009

CUENTAS CLARAS

No hace falta tener por novia a una cajera del Disco para darse cuenta de que a veces los números no cierran. Consta aclarar que no estoy hablando de dinero.
Una amiga mía me recriminó ayer lo siguiente: "Mahatma Gandhi dijo : Ojo por Ojo y el mundo se quedara ciego!..." (su comentario seguía, pero esta es la parte en la que voy a detenerme por ahora). "Ojo por ojo", con la lección bien aprendida, a lo sumo puede llevar al mundo a quedarse tuerto; sin embargo, no son pocas las niñas avivadas te pican ambos ojos cuando vos les metiste el dedo en uno solo. ¿Qué hay que hacer en ese caso? ¿Dejarla salir ilesa?, ¿poner la otra mejilla? ¿Creerse Ten Shin Han y confiar en un tercer ojo que nos queda ileso? Francamente, a mi me gustan mucho las cuentas claras. Uno por uno es justo y dos por dos lo es igual. Y no es que yo sea fanático de los empates, pero me considero un tipo honesto.
A veces me encuentro en la duda y no sé bien qué pensar. Si me quieren tomar por tonto, si ellas todavía suman con los dedos, si tienen mala memoria o bien si quieren sacar partido de todas las situaciones. Me inclino por una combinación entre la primera y la última opción.
A fines de ser lo suficientemente gráfico, expondré un ejemplo que virtualmente ha sido el que me enseñó a estar más despierto.
Voy a resumirlo sin entrar en una retórica poética como sería habitual en mí.
Durante mi primer noviazgo, cometí el error de comentarle a ella (mi novia) que de tanto en tanto solía histeriquear por chat con una chica que vivía en la loma del ojet... muy lejos. Para graficarlo, yo en Cba., la otra en Chubut. Cronológicamente, estamos hablando del año 2000 - 2001. Las webcam no eran cosa común, como tampoco lo eran las cámaras digitales. Generalmente, durante esos primeros años de internet, aquellos que querían verse la cara a través de los portales de chat, tenían que recurrir a la molestia de escanear una foto auténtica y mandarla por mail con sus 10Mb de peso a una casilla de correo cuya capacidad era de 500 Kb. Informo de todo esto, porque necesito refuerzos a la hora de señalar que ella (la otra) y yo, no nos conocíamos las caras. Era un histeriqueo sin rostro, a tal punto lo consideraba inocente, que como ya mencioné, se lo comenté yo mismo a quien por aquel entonces era mi novia.
No hace falta que describa el desplante que siguió. Insultos, indignación, llanto y muchos, muchos, muchísimos gritos.
Supuse que ella tenía razón. Estando yo en una relación seria, no había motivos para andar con tantas idioteces de nene chiquito. Corté toda relación con la sureña y jamás volví a saber de ella.
Tiempo después, me entero por mis medios (medios de novio desconfiado que de tanto en tanto te revisa el correo cuando siente que hay algo raro de por medio) que mi novia estaba histeriqueando de igual forma con un porteño al que había conocido la última vez que viajó a Buenos Aires. Quise increparla y me dijo con un tono que denotaba seguridad y certeza en sus palabras: "no podés decirme nada, porque vos hiciste lo mismo".
Como me agarró bien en frío, le di la razón por un momento... pero luego, las sumas entraron en juego: yo "histeriqueo" - ella "se enoja". Ella "histeriquea" - yo NO puedo "enojarme".
A ver, a ver, a ver, a ver... un momentito, detengamos el marcador, paren la cuenta, frenen el score-board. ¿Me parece a mi o me están robando un puntito? Si ella se enoja cuando yo me mando una cagad@, me parece que estoy en TODO mi derecho de enojarme y hacer el MISMO planteo que ella hizo, cuando la que se manda la cagad@ es ella!!!
Ya voy entendiendo cómo funciona. Cuando uno se manda un moco primero, no sólo da vía libre para que ella haga exactamente lo mismo, sino que renuncia a sus posibilidades de reproche. Es decir que un desliz tuyo, vale por dos de ella. Algo no me suena bien.
La situación se repite: Yo llego tarde, ella se enoja. Ella llega tarde (porque yo hice lo mismo antes), pero yo no puedo enojarme (porque yo hice lo mismo antes). ¿Ven cómo funciona? Es un 2 x 1
¿La dejaste plantada para irte con los chicos? No hay drama, ella va a enojarse por eso, luego va a dejarte plantado ella a vos para irse con las chicas, pero adiviná... SI!!! ACERTASTE!!! no vas a poder decirle nada!!! ¿por qué? - Obviamente, porque vos se lo hiciste primero-
Es más que clara la forma en la que una mujer lleva las cuentas. Es una gran promoción y las putead@s están de oferta. Ella tiene todos los derechos. Enojarse y vengarse.
¿A eso ahora lo llaman ojo por ojo? NO! ojo por ojo, es uno por uno, es un número par, es un equivalente justo e implica UNA reacción de ella, para UNA acción mía! La otra, la que sobra, es un extra que me quedan debiendo y no les quepa duda que pienso nivelar los tantos. Esto no es basket, acá no cuentan dobles y triples, mucho menos... y a la que venga con esa idea, más le consta parecerse a Michael Jordan. No sólo por su habilidad con la pelota, sino porque es un gran economista de sus propias finanzas. A ese grone, los números le cierran siempre.




lunes, 26 de enero de 2009

TODO O NADA

El comunismo tiene su precio. Igualar a todos los hombres y someterlos a un mismo nivel, es imposible. Sea cual fuere la situación que la humanidad atraviese, siempre existirá la figura de aquel que pretenda autosuperarse y como contrapartida, no estará el fracasado, sino aquel que pretende aventajar a los demás. Algunos eligen hacerlo por medios honorables. El resto... el resto es otra historia.
En realidad no. No es otra historia, es parte de la misma. Esa que decidimos obviar.
La humanidad cae en desgracia y ni aún así el espíritu humano puede entrar en común unión con sus semejantes. Aquel que se aviva primero, somete a los demás y trata de obtener el mayor beneficio posible. Ejemplos de estos hay miles, pero no voy a ahondar en ejemplos por ahora... he sido acusado de postear textos interminablemente largos.
Mi teoría simplemente se remite a certificar que no somos todos iguales y la igualdad no siempre es buena... sin embargo, las mujeres no aprenden. Insisten en que son iguales y algunas lunáticas, en que son superiores (más allá de que en el campo de las ciencias, los deportes y el arte los galardonados masculinos superan ampliamente a las féminas).
Sin entrar en debate, me pregunto si el género femenino es realmente lo suficientemente obtuso como para admitir abiertamente (y en pleno siglo XXI) que desea la igualdad con los hombres. La historia ya ha probado las diferencias y pareciera que ellas no se resignan a creerlas...
...pero ahondando un poco, nos damos cuenta de la ventajera, pérfida y egocéntrica verdad. La mujer no quiere IGUALDAD con el hombre; lo que quiere, son las VENTAJAS de ser hombre, sin perder las ganancias que implica ser mujer.
Voy a tratar de ser breve (tratando de mantener mi promesa) y a pesar de que se me ocurren mil cosas para acotar, me remitiré únicamente a refutar la famosa frase "un hombre puede acostarse con muchas mujeres y no pasa nada, pero nosotras hacemos lo mismo y somos unas put..."
Respuesta: SI! Véanlo del sgte. modo: Supongamos que la naturaleza, Dios o lo que fuere nos ha separado en dos bandos. Los hombres y las mujeres. Dotó a los primeros con fuerza física y a las segundas, con fuerza sexual. Socialmente, está mal visto que los machos golpeen a las hembras, cuando lo contrario es hasta admirable. Una mujer le propina una golpiza a un hombre y es prácticamente una heroína. Sucede lo contrario y el hombre va preso.
¿Se ve a caso, a un hombre despotricar contra tal situación? "oh, claro... si ella me pega, está bien, pero cuando yo la cacheteo me tildan de poco hombre... que injusto!!!"
Supongo que ambos géneros tienen fuerzas distintas y está mal visto que uno abuse de su fuerza para con el otro. Pero supongamos que una mujer lee esto y dice "este pibe habla huevadas"... bueno, no nos quedemos con esto solo entonces y vayamos más lejos: Veamos que cosas, una mujer NO está dispuesta a perder si es que consigue la igualdad con el hombre:
  • En caso de divorcio, el hombre que se queda con la mitad de la fortuna de la mujer, es un vividor. Lo opuesto es lo normal.
  • Hombre que cuida a los chicos mientras la mujer trabaja, es un mantenido. Lo opuesto es normal.
  • Hombre que no paga la cuenta, es un rata. Mujer que no paga la cuenta es la novia.
  • Hombre que no abre la puerta para la dama, es poco caballero. La mujer puede no saber lo que es un picaporte en toda su vida.
  • Hombre que no satisface a la mujer en la cama, es mal amante. Mujer que no satisface al hombre merece respeto y comprensión... hay que entender que ella se inhibe.
  • Hombre que llora es maricón. Mujer que llora, puede enojarse si no recibe contención.
  • Hombre que comenta detalles sexuales es (nuevamente) poco hombre. La mujer no se calla nada y menos si tiene cosas malas para contar.
  • Al hombre le pueden decir que está más gordo (en la cara).
  • La mujer puede expresar abiertamente miedos, inseguridades, malestares y llantos. Al hombre, eso no se le tolera.
  • Una mujer no sale con un hombre menos inteligente que ella. Lo opuesto sucede todo el tiempo.
  • Una mujer no sale con hombres menos ambiciosos y si lo hace, lo obliga a mover el cul@ y que haga algo de su vida. Lo inverso se da todo el tiempo y hay que aceptarlas como son.
  • La mujer puede gritarLE y hacerLE escándalos públicos.
  • La mujer dice no mirar hombres en la calle cuando va de la mano con su pareja (cosa que yo dudo) pero SE hace mirar... a nosotros se nos prohíbe todo.
  • Hombre que después del sexo dice "por favor no comentes nada en la oficina" tiene cola de paja. En ellas, es cosa de todos los días.
  • Te pueden decir que estás mal vestido. Que tenés feo gusto o que te queda mal el peinado nuevo. Vos a ellas no podés decirles nada o sos un insensible.
  • Ellas pueden ser aburridas mientras estén buenas. Nosotros tenemos que HACERLAS REIR y entretenerlas, a pesar de ser Brad Pitt.
  • El feminismo es un movimiento progre. El machismo es considerado prácticamente cavernicolaneano. Todo hombre machista es un troglodita. Mujer feminista, es una académica orgullosa.
  • Si un hombre cualquiera sale desnudo a la calle ofreciendo sexo, va preso. Una mujer cualquiera que haga eso, algo liga... (evidentemente acá está el factor por el cual quedan como unas trolas, amigas: PARA USTEDES ES MÁS FÁCIL CONSEGUIR SEXO!!)
Seguiría así toda la noche, pero la verdad, ya no sé ni que escribí y no quiero ser repetitivo. Si después de todo lo mencionado anteriormente, todavía hay alguna estúpida que hace problema porque creo merecer ser más promiscuo que ella, entonces evidentemente las mujeres lo quieren todo, y todo, no se puede.

jueves, 15 de enero de 2009

PARA ARJONA CON CARIÑO

No dejé bien en claro en la entrada anterior, el gran odio que albergo hacia Arjona y sus canciones pedorrísimas. Así que acá voy a hacer un nuevo intento por demostrar muy creativamente lo que asumo que es lo que él hace para ganarse la vida.

NUEVA CREACIÓN INÉDITA DE ARJONA, ENCONTRADA QUIÉN SABE DONDE, POR MI... EL AUTOR DEL BLOG. DISFRUTEN. SE TITULA: MÁS DIFÍCIL QUE PELLIZCAR UN VIDRIO
MÁS DIFÍCIL QUE PELLIZCAR UN VIDRIO
Un dia estaba mas aburrido
que escuchar ajedrez por radio
y pensaba mientras me mordía el labio
"que lindo sería si no te hubieras ido"
pero tu partida se consumó en hecho
y tu regreso espero ansioso por la mañana
la vida si tin ahora, tiene menos onda que bailar con la hermana,
o pasársela mirando un helecho.
arrancarle una pestaña a lo que nunca tuvo ojos,
es ahora moco e' pavo
lo difícil no es olvidarte,
sino esperarte aquí sentado
y lloro mucho por extrañarte tanto
y por pensar en tí más de la cuenta
estando sin tí la vida es cruenta
pero no te agrandes, a veces me las aguanto
estoy notando con asombro
que la cama me queda enorme
pero he de cargar con tu ausencia en los hombros,
por más que el verso se deforme
tu partida es mi culpa, me doy cuenta hilando fino
en la cama no cabías; antes tenía un pingüino
Reemplazarte es más difícil
que envolver un triciclo para regalo
o hacer gárgaras boca abajo
pero para olvidarte hay un atajo
voy a mantener la mente entretenida en otra cosa;
aunque la opción sea bochornosa: buscaré un verdadero trabajo.

miércoles, 7 de enero de 2009

ARJONA CANTANDO COHELO

Es bien sabido que estos pseudo artistas, supuestos hombres comprensivos para con el sexo femenino, son mis jurados enemigos mortales. Como todo hombre se define por sus contrarios, aquí les brindo homenaje a sendas "personas" (si es que así pueden ser llamadas). La canción se titula A ORILLAS DEL RIO PIEDRA (de Cohelo y Arjona... o lo que yo imagino que la combinación sería.)
Para aquellos que no lean Cohelo (y hacen muy bien), lo que está resaltado con amarillo son los títulos de algunos de sus muchos, muchos libros. El tipo escribe tres o cuatro por año... saca casi tantos libros por semestre, como la Mona discos. Bueno, sin más preámbulo, los dejo con esta... "canción" que bien podría haber sido escrita por cualquiera de los otros dos perdedores. Tres, si contamos a la Mona.

A la orilla del rio piedra
una gorda bigotuda rompio en llanto
yo le dije, calma obesa, no es pa tanto
consume menos grasas y más hiedra

A la orilla del rio piedra
una cancion me sente a escribir
al enterarse de esto verónica,
la muy turra decidio morir

De poeta no tengo nada
de cantante no tengo un pelo
me las doy de don juan tirano
a pesar de que soy enano
levanto minas hasta el cielo
mi ultima conquista fuerte
fue la bruja de porto bello

Quiero ser recordado por quien me ama
como el mejor amante en luto
no como cantante puto
pues tengo un record en la cama
es de a penas once minutos

La bruja quedó embarazada
y preguntó "como le pondremos"
yo rimando como siempre, dije:"brida: el don que cada uno lleva dentro"

La bruja murió en el parto
y Brida murió con ella
mis canciones son epopeya
forzando una rima escribo "lagarto"
de escribir idioteces, yo no me harto

Escribo odas a las mujeres
sus penas, alegrías y glorias
menstruaciones, menopausias e historias
de histeria y otras cosas normales
no me canso de recitar
pseudorimas a los flujos vaginales

Quiero jugar a la alquimia
y buscar en el Tibet alguna respuesta
lo de la alquimia va por Cohelo
la rima, para conseguir una teta
o una muchacha en celo.

(Producida por Sil P. - Agustín G.)
**Porque la lucha es mejor si somos dos contra dos**